lunes, 19 de abril de 2010

Antonio Cieri


Y uno de estos Arditi del Popolo que luchó en España se llamaba Antonio Cieri, anarquista nacido en Vasto en el año 1898 y muerto en el sitio de Huesca en 1937.

En la calle donde vivo actualmente en Parma, Cieri tiene su nombre inciso en una placa. El Borgo del Naviglio, donde luchó en una de las dos grandes barricadas parmesanas contra el fascismo existentes en la ciudad. Peleó junto con otros nombres como Guido Picelli en el puesto de comandante de los Arditi del Popolo a difesa del Naviglio plantando cara a las tropas fascistas dirigidas por Italo Balbo; militar directamente colocado por Mussolini en el puesto.
En el 25 funda junto a otros compañeros el periódico anarquista Umanitá Nova todavía hoy en funcionamiento repartido por la Federación Anarquista Italiana (FAI). Como los combatientes del “Batallón de la Muerte”, Cieri viene a España para combatir el fascismo y se alista en la “Sección Italiana de la Columna Ascaso”. Fue miembro del equipo de los bomberos a los que el mismo enseñaba hasta que en el sitio fallido de Huesca muera acabando una vida entregada a un ideal al que también imagino en un período de sed de revolución peleándose en miles de lugares contra los que impedían que se fraguase lo que estaba tan cerca.

- Para tr(a)nshistoria y desde Parma, Sergio Ramiro (más conocido como Lord Bohemius).

sábado, 10 de abril de 2010

El Batallón de la Muerte


Poco tienen que ver los anarquistas con el ejército. Poco o mucho, depende de cómo se mire. Incluso hay veces que todo se confunde y te encuentras, por ejemplo, con un batallón armado hasta los dientes de camisas negras, negras como el carbón, pero lucidas por anarquistas. Anarquistas que, para más inri, llevan banderas con algo parecido a las calaveras de las SS (aunque nada más lejos).
Empiezo a explicarme. Conocí su existencia al leer La CNT en la Revolución española, el voluminoso libro de José Peirats. Supe que se llamaba el Batallón de la Muerte, aunque también se le conocía como Centuria Malatesta. También supe que murieron casi todos y que uno de sus comandantes fue Camilo Berneri (el de la foto), hay es nada, el autor de Entre la Revolución y las trincheras, asesinado por los comunistas en el 37 por defender el principio de ganar la guerra, pero también la revolución.
Se trataba -me refiero al batallón italiano- de un grupo de antifascistas libertarios, fogueados en los arditi del popolo, que habían huido de la italia mussoliniana esperando batirse el cobre contra el fascio en otros territorios. Algunos de ellos había llegado a Barcelona unos meses antes para participar en la Olimpiada Popular, organizada por los obreros para hacer frente a las olimpiadas de Berlín que iban a celebrar los nazis.

Los imagino desfilando por las calles de Barcelona. Seguro que darían bastante miedo al personal. Entre milicianos desarrapados y fogosos, imaginad esa tropa perfectamente uniformada. Su estantarte copiado de los revolucionarios majnovistas que durante la revolución rusa defendieron el comunismo libertario, la anarquía, hasta que el ejército rojo pasó por encima de ellos a sangre y fuego. Exactamente lo mismo que veinte años después en Aragón. Cambiamos a Trotsky por Líster y tenemos una repetición perfecta. La varguardia pasando por encima de los espontaneístas, capaces, mira por donde, de levantar un proyecto revolucionario sin el liderazgo del partido comunista (¡y en plena guerra!).
Poco más se sabe de ellos. Como tantos otros voluntarios extranjeros, dieron con sus huesos en una tierra que acabaría por igrorarlos. Hoy al menos unas cuantas fotos nos permiten saber que existieron de verdad.

lunes, 5 de abril de 2010

El documental antropológico






El domingo, a las 15:00. ¿Vosotros qué hacéis? Yo suelo tirarme en el sofá con un vaso de café y una caja de ibuprofeno. Curiosamente, los domingos por la mañana me duele la cabeza siempre. ¿Y qué hago más? Pues ver Otros pueblos, el programa de divulgación antropológica de Luis Pancorbo. Lo ponen en La 2. Este domingo tocaba resumen de sus 100 programas. Echadle un ojo si tenéis ocasión. Probablemente os muerda, aun ligeramente, la curiosidad. Por la antropología, claro.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...