sábado, 19 de noviembre de 2011

Miserable Ilustraición


Aquí se puede apreciar cómo la Ilustración, siendo un ideal de la humanidad, es de hecho un proyecto europeo con vocación universal. Europa sabe que ha descubierto la razón y la libertad y, dada la naturaleza universal de su descubrimiento, se propone como guía de la humanidad. Quien quiera progresar -y nada puede sustraerse a esa ley de la naturaleza humana- "recibirá de nosotros lo que nosostros tuvimos que descubrir", es decir, tendrá que seguir su camino.

El otro testimonio es de Marx y reza así:

Bakunin reprochará a los americanos una guerra de conquista que, desde luego, asesta un rudo golpe a su teoría fundada en"la justicia y la humanidad", pero que fue llevada [se refiere a la guerra] pura y sencillamente en interés de la civilización. O ¿es una desgracia que la espléndida California le fuera arrancada a los perezosos mexicanos que no sabían qué hacer con ella (1).

Marx reconoce que "el interés de la civilización" pone orden entre pueblos diferencialmente desarrollados, legitimando que se obligue al más retrasado a seguir los pasos del más desarrollado.

Son dos testimonios más que representativos de la interpretación de la Ilustración: por un lado, proyecto universalista con contenidos identificables positivamente, pero siempre un proyecto, eso sí, gestionado por Europa. Esa doble condición (universalidad y eurocentrismo) da pie a un tratamiento colonialista (antes se hablaba del "despotismo ilustrado") de la verdad y de la ética, lo que fatalmente conduce a una concepción igualmente colonialista -y por tanto particularista- de la universalidad.

(1) F. Kevy, Histoire d´un bourgeois allemand, París, Grasset, 1976, p. 154.

- De La herencia del olvido, Reyes Mate. Errata Naturae. Madrid: 2008.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Comunistas en la casa de Juan March


Para Sergio y el que escribe, buscar la sede de la Fundación Juan March, ubicada en el barrio de Salamanca de Madrid, fue algo parecido a una aventura contemplativa. Hace poco nos enteramos en una charla que durante el sitio de Madrid (del 37 al 39) no cayó ni una sola bomba en ese barrio. Se ve que la aviación nazi sabía bien quiénes vivían allí... Pocos quintacolumnistas murieron bajo las bombas. Pero no nos vayamos por las ramas... Si hablaba de que buscábamos la sede de la Fundación Juan March es porque queríamos ver una exposición sobre la vida y obra de Alexandr Deineka, un propagandista soviético, es decir, un agitador de conciencias y un bolchevique convencido. Y he aquí la más que evidente contradicción... Qué es lo que lleva a los mandamases de la Fundación Juan March a organizar una exposición que revisita el cambio operado en la Rusia de los zares tras la Revolución de Octubre. O peor, cómo puede organizarse esta exposición en la casa del mayor financiador del golpe de Estado de los furibundos anticomunistas Mola y Franco. Sergio y yo no nos lo explicamos muy bien, por eso lo dejaremos para otra entrada, tal vez en MineÁRTpolis, cuyo título podría ser Vidas y desventuras del gestor cultural de una fundación de ricachones. Se la dejo a mi compañero, al que le gustan este tipo de retos.


Por cierto, ¿la exposición? Id a verla, no os arrepentiréis.

P.D.: Y para rizar el rizo... Sabíais que institución conserva la biblioteca privada de Julio Cortázar. Efectivamente, la Fundación Juan March.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...